Textos Post-Traumáticos/ II
Hablaba hace muy poco con un veterano de la motocicleta y me contaba que ya lo han aventado muchas veces, y me lo dijo con toda la naturalidad brutal del tercer mundo, con toda la bárbara insensibilidad en un país con el trafico desordenado, donde no hay señalizaciones y donde esta a la orden del día el insulto como medio para hacerse respetar. El motociclista es mensajero, de esos pobres que para invierno se visten de nylon negro y sufren igualmente en verano. Me dijo que entre sus muchos accidentes recuerda uno en la Atanasio Tzul cuando una señora adelantó su automóvil más de la cuenta y, como suele suceder, el pensó que ella iba a parar. “Diga que la moto trae una parte de metal adelante que fue la que choco contra la trompa del carrito, porque si me hubiera topado la pierna me la deshace”, me dijo. Me contó que la señora sólo le dio cien quetzales, porque el sintió que sólo había sido un golpe leve en el pie; pero aún después de un año, me dice que todavía le duele. Hablé con otro que me contó que sólo Dios lo ha salvado de muchas, porque una vez por Nueva Motserrat tuvo su peor accidente, en el que estuvo, luego de salir volando por el aire, más de diez minutos inconciente y además el automovilista imprudente se había huido, aún así tuvo la mala suerte que nadie lo auxilió y tuvo que llevar, el mismo, su moto al taller más cercano.
Hace menos de un mes, desde la esquina de mi trabajo vi como era arrollado un motociclista y no entendí la magnitud de aquello. Ahora entiendo el primitivo sistema vial al que esta expuesto desde el ciclista hasta el trailero, porque en el fondo no es un problema que tenga que ver plenamente con el conductor, sino con la señalización y ordenamiento general del transporte, con la histeria colectiva y la educación más elemental aprendida en el hogar. Creo que el conductor con buena fe, hace hasta lo imposible para no violar las reglas del juego. He oído y he visto que los conductores de camionetas son los más irrespetuosos de todo, he visto a los pasajeros quejarse de las altas velocidades cuando están peleando pasaje, hemos visto los accidentes, sabemos las consecuencias, estamos enterados de lo peligroso que es ahora subirse a un bus urbano y lo suicida que pude volverse estar al lado del chofer o del ayudante. Es poca gente la que recurre a una bicicleta para transportarse. Las motos son la gran mayoria. Las rutas viales en Guatemala no tienen espacio para los ciclistas, por eso es aplaudido Pasos y Pedales, por eso se han ido abriendo espacios como el de la zona 2. Porque yo puedo ser testigo de que hay mucha gente responsable al volante, pero también hay muchos que no saben que están manejando un arma mortal, sin parecer exagerado, de toneladas de hierro (4.000 Kgrs.), que puede terminar en un segundo con la vida de alguien o con la vida del mismo que la conduce.
Recomendaciones para Ciclistas:
-Llevar casco.
-Revisar, antes de todo, los frenos.
-Revisar, antes de todo, las llantas.
-Llevar un pequeño Kit de pinchazos.
-Un inflador.
-Llevar reflectores en la delantera, llevar también
en la parte de atrás.
-Es aconsejable, también para ciclistas, un chaleco reflector.