domingo, 20 de octubre de 2013
HISTORIA APÓCRIFA DE LA PALABRA
Hace muchos años cuando no existía el polvo y los átomos olvidaban su nombre en explosiones silenciosas ya existía la palabra. Era dibujo de cristal, transparente como el fuego invisible. Antes de eso la boca del espacio guardó silencio hasta que pronunció la luz. Entonces dijo al hombre y el hombre entró gateando como un niño, como un viejo prematuro. La palabra entonces le hervía por dentro como un magma, pero el hombre siendo tan reciente no supo como predecir la vocal que le nacía entre los miembros, desde la sangre. Hace muchos años, el hombre por fin se puso de pie y ya grande como un gigante que se balancea sin saber a donde ir, por fin se preguntó cómo era posible que siendo de polvo y agua, tuviera largos sueños donde no intervenía el suelo. Se dio cuenta que en los sueños hablaba. El lenguaje, pensó, es divino, y así fue como entendió que no estaba solo.
La palabra se dibujaba entonces en los labios. Detrás de todo lo simple fue naciendo, y entonces las palabras eran pocas, tan pocas que la gente no podía inventar mentiras.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Picto—grafías
Hace años, Javier Payeras me dio el consejo de leer el ABC of Reading de un exiliado norteamericano en Paris, llamado naturalmente: Ezra...

-
Entrevista a Patrick Suskind. No vio su bonito rostro salpicado de pecas, los labios rojos, los grandes ojos verdes y centelleante...
-
¿Qué clase de mundo es éste que puede mandar máquinas a marte y no hace nada para detener el asesinato de un ser humano? José Saramago In Co...
-
La semana pasada estuve en dos actividades. Una de ellas en un pueblo dulce, donde los duraznos se caen de los arboles y los devora el tiem...
No hay comentarios:
Publicar un comentario